Llenar el tanque de gasolina hasta el tope puede parecer práctico, pero puede dañar el sistema del vehículo, causar derrames y generar gastos innecesarios.
Llenar el tanque de gasolina hasta el tope puede parecer una buena idea para aprovechar al máximo cada visita a la gasolinera, pero en realidad puede causar varios problemas. Aquí algunas razones por las que no es recomendable llenar el tanque al máximo:
- Daño al sistema de emisiones: Los autos modernos tienen un sistema llamado canister de carbón activado que captura vapores de gasolina para evitar que se liberen al ambiente. Si llenas demasiado el tanque, la gasolina líquida puede llegar a este sistema y dañarlo.
- Riesgo de derrames: Al seguir echando gasolina después de que la bomba se detiene automáticamente, puedes provocar derrames, lo que no solo es peligroso, sino también contaminante.
- Presión innecesaria: Llenar el tanque por encima del límite puede generar presión en el sistema de combustible, lo cual puede reducir su vida útil o causar fallos.
- Desperdicio de dinero: Parte de la gasolina extra que intentas meter puede evaporarse o derramarse, lo que representa un gasto innecesario.