El chavista Jorge Rodríguez, presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, en un discurso.
El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), el Consejo Nacional Electoral (CNE), la Asamblea y la cúpula militar de Venezuela rechazaron este viernes, 13 de septiembre de 2024, las sanciones de Estados Unidos contra 16 funcionarios del país caribeño, entre ellos, miembros de estas instituciones, a los que Washington acusa de proclamar «falsamente» a Nicolás Maduro como presidente electo.
El TSJ, a través de un comunicado leído por su presidenta, la chavista Caryslia Rodríguez -una de las personas sancionadas-, expresó su repudio a lo que calificó como «acciones injerencistas» de EE.UU. en los asuntos internos del país suramericano.
Entre los sancionados se encuentran también los magistrados Fanny Márquez, Inocencio Figueroa, Malaquías Gil Rodríguez y Juan Hidalgo.
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Se trata, según el máximo tribunal, de una «nueva acción colonialista», y aseguró que no va a «sucumbir ni mucho menos» a doblegarse «ante fuerzas extranjeras».
Por su parte, el presidente del CNE, Elvis Amoroso, repudió, en un comunicado firmado únicamente por él, el «infame acto de injerencia» de EE.UU. con el que «se intenta señalar y amedrentar a un conjunto de servidores públicos venezolanos», entre ellos -señaló- la rectora principal Rosalba Gil Pacheco y el secretario general del ente comicial, Antonio Meneses.
EE.UU., según el documento, posee «uno de los más patéticos y obsoletos sistemas electorales del planeta, incapaces de dar certeza en sus resultados, dejando muchas dudas en sus elecciones, como ha sido evidente en innumerables ocasiones».
El presidente del CNE -institución que no ha publicado los resultados de las presidenciales de forma desagregada tras 47 días de los comicios, pese a que estaba contemplado en su cronograma- considera que, por tanto, el Gobierno estadounidense «carece de moral para evaluar y opinar sobre temas electorales».
El Parlamento, controlado por el chavismo, también rechazó, en «los términos más enérgicos, la agresión continua y permanente por parte del Gobierno supremacista» de EE.UU., al «imponer medidas coercitivas unilaterales» contra venezolanos «dignos y valientes, como el primer vicepresidente de la Asamblea Nacional, el diputado Pedro Infante».
«Le decimos al imperio decadente de los Estados Unidos de América y sus lacayos europeos que no hay medidas coercitivas unilaterales que frenen el rumbo libertario e independentista que ha tomado el pueblo venezolano», agregó la AN en el comunicado, firmado por su presidente, el chavista Jorge Rodríguez.
El Departamento del Tesoro también sancionó al fiscal Luis Ernesto Duéñez, quien emitió la solicitud de arresto contra el abanderado de la mayor coalición opositora, la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), Edmundo González Urrutia, al que EE.UU. considera el ganador de las elecciones del 28 de julio.
Cuatro militares sancionados
Asimismo, sancionó al comandante estratégico operacional de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), Domingo Hernández Lárez, y el comandante de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, policía militarizada), Elio Estrada, a quienes acusa de reprimir a la población.
Además de Hernández y Estrada Paredes, esto incluye al comandante de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB); Johan Hernández Lárez, comandante de la Región Estratégica de Defensa Integral Capital de la GNB y Asdrúbal Brito, director de Investigaciones Criminales de la DGCIM (inteligencia militar).
Bajo estas sanciones, quedan bloqueadas todas las propiedades y activos personales que puedan tener en la nación norteamericana y se les prohíbe realizar transacciones financieras, sin incidencia en la ciudadanía o bienes estatales.
El ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López, también se pronunció.
«La FANB rechaza contundentemente las medidas coercitivas unilaterales (…) a 16 funcionarios del Estado venezolano, que incluyen oficiales generales y almirantes integrantes del alto mando militar y comandantes de unidades superiores», dice el comunicado de la FANB leído por Padrino durante una transmisión del canal estatal VTV.
Asimismo, dijo que, con este «nuevo acto grosero de injerencismo», el «imperialismo norteamericano» pretende «continuar asumiendo» su «rol de policía del mundo» a través de acciones para «derrocar al Gobierno legítimamente constituido de la nación venezolana».
F: PRIMICIAS
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