Imagen tomada de primicias.
Los cables en la ciudad de Quito no solo causan una contaminación visual, sino que en muchos casos representan un riesgo para la seguridad. Por esta razón, el alcalde de Quito, Pabel Muñoz, se ha reunido con diversas autoridades de la capital con el propósito de definir los proyectos de soterramiento de cables programados para el año 2024.
La meta del Municipio de Quito es establecer colaboraciones público-privadas para llevar a cabo el proceso de soterramiento de cables eléctricos en la ciudad. Esto es especialmente importante considerando que el soterramiento de cables a lo largo de 150 kilómetros tendría un costo aproximado de USD 30 millones.
Dentro de las avenidas que se contemplan para intervenir en este proyecto se encuentran Río Coca, 6 de Diciembre, Mariscal, 3 de Noviembre y Pérez Guerrero. La Secretaría de Hábitat y Vivienda mantendrá una estrecha coordinación con las empresas proveedoras de servicios, como la Empresa Eléctrica, la Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT) y empresas de cable, para planificar las intervenciones correspondientes. Además, se está evaluando la implementación de controles sobre el cableado y la solicitud de retirada de cables en desuso. También se considera la posibilidad de aplicar medidas administrativas y sanciones a través de la Agencia de Regulación y Control de las Telecomunicaciones (Arcotel).
